martes, 11 de enero de 2011

Periodistas y pitonisos

En una gala al más puro estilo Hollywood, la flor y nata del fútbol mundial se congregó en Zurich para conocer el nombre del ganador del renovado Balón de Oro, un trofeo resultante de la fusión entre el histórico galardón que la revista France Football creó en 1956 y el mucho más reciente FIFA World Player, ideado por la Federación Internacional en 1991.

Al margen de la lógica expectación que estos premios individuales suelen despertar en los aficionados, esta edición de 2010 había generado mucho revuelo en nuestro país porque dos jugadores de la Roja presentaban serias opciones al triunfo: Andrés Iniesta y Xavi Hernández aspiraban a acompañar a Luis Suárez como segundo español en el Olimpo de los dioses del fútbol. No en vano, algún diario internacional ya se había apresurado a anticipar en exclusiva la victoria de uno de ellos.

Pero al final fue el tercero en discordia, el argentino Lionel Messi, quien se llevó el gato al agua y se hizo con el premio por segundo año consecutivo. La decepción de la hinchada española ha sido notable, tal y como refleja la inmensa mayoría de los medios de comunicación. Injusticia o chasco son algunos de los términos más leídos hoy en una prensa deportiva inmersa en el desencanto.

Pues sí, no nos lo han dado, una pena. Pero sinceramente, ¿qué nos llevó a creer que esta vez iba a ser distinto? Quizá el éxito del Mundial de Sudáfrica nos hizo pensar que podíamos con todo, que este año no había obstáculo que pudiera privarnos de colocar a uno de los nuestros en lo más alto de tan glamuroso podio. Sí, eso es verdad, pero tampoco es menos cierto que todas esas ilusiones y expectativas han venido alentadas por la tropa de pitonisos y futurólogos que colman la prensa deportiva. Y así lo reconoce Tomás Campos, uno de los más coherentes redactores de la versión digital de Marca, en su post El disgusto de doña Paca, un breve pero certero artículo que pone el dedo en la llaga de aquellos medios especialistas en vender la piel del oso antes de cazarlo.

1 comentario:

  1. No puedo resistirme a recomendaros el post El Balón de Oro de Charles Chaplin, un fantástico artículo de Carlos Marañón, que como es habitual, mezcla magistralmente los mundos del fútbol y el cine.

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