
Mucho se ha hablado sobre las peculiaridades del balón oficial del Mundial de Sudáfrica 2010.
El Adidas Jabulani ha sido muy criticado por gran parte de los futbolistas, fundamentalmente los porteros, quienes más han padecido su comportamiento errático. Su escaso peso, unos 440 gramos, hace que el esférico experimente un denominado efecto nudillo cuando alcanza gran velocidad, lo que propicia que su dirección varíe de forma aleatoria durante el vuelo.
Los aficionados que quieran
recordar los balones con los que se jugarón los anteriores Campeonatos de Mundo tienen la oportunidad de disfrutar con una extraordinaria infografía que ha diseñado el diario
The New York Times.
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The Evolution of the World Cup Ball y date un baño de nostalgia.
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